Podemos diferenciar el arte
romano en tres artes fundamentales la
arquitectura, la pintura y la escultura, en la antigua roma muchos fueron los
autores que se dedicaron a estas artes, por lo que disponemos de muchos
elementos para poder analizarla.
A continuación analizaremos
brevemente estas tres artes y comentaremos algunas de las características más fundamentales de cada una de ellas.
La arquitectura: La
arquitectura romana, fue influida por los orígenes griegos y etruscos. Al ser
influida por la arquitectura griega también seguía tres órdenes establecidas
con los que construían la mayoría de sus templos y edificios. Estos tres
órdenes eran el dórico, el jónico y el corintio. Se diferenciaban entre ellos
por tener estilos distintos en las estructuras de las columnas. La tipología de
esta arquitectura era muy diversa, aunque la mayoría eran templos también
habían teatros, termas, anfiteatros o circos.
La escultura: Al igual que la arquitectura, la escultura también tenía influencias griegas y etruscas , aunque en Roma se empieza a comprender la escultura no solo como un arte para representar sus creencias en los dioses, sino también como un arte decorativo por lo que la mayoría de la escultura tuvo una tipología funeraria y política.
La pintura: La pintura en la antigua Roma se basaba en la decoración de sus paredes con pinturas murales, estos murales mostraban un gran colorido movimiento. Las pinturas podían pintarse individual en una pared, como un conjunto de pinturas individuales o en paneles enteros que ocupaban un gran espacio. La tipología de este arte eran caricaturas, retratos, hechos cotidianos, celebraciones o temas mitológicos.
Al convertirse Roma en un gran imperio, extendió su cultura y artes, dejando así ejemplos de su arte por todo el mediterráneo, por lo que gracias a esta expansión a día de hoy podemos seguir disfrutando de estas artes que se desarrollaron durante aquel periodo de expansión y esplendor del imperio romano.
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